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Mostrando entradas de noviembre, 2021

Leyendo se entiende la gente: NY City. Escalinatas, de Will Eisner.

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  Esta  maravilla  que  aún  conservo  llegó  en  un  cómic  que  compré siendo  aun  estudiante  y  que  ofrecía  un  especial  en  3D.  Curiosamente lo  que  se  quedó  en  mi  retina  no  fueron  las  líneas  rojas  y  verdes  de  la ilusión  tridimensional,  sino  las  siete  primeras  láminas  de  la  revista. Con  18  o  19 años  aun  desconocía  al  maestro    Will  Eisner,  pero  estas tres  primeras  láminas  de  escaleras  me  fascinaron.  No  era  sólo  el dibujo,  el  tono,  sino  cómo  el  artista  alteraba  el  tiempo  y  el  espacio  en función  del  relato  que  estaba  contando.  Qué  montaje  y  eso  que  en aquel  momento  no  sabía  explicar  el  por  qué  de  esa  fascinación. Estas  tres  páginas  forman  parte  de  uno  de  los  álbumes  que  Will Eisner  hizo  sobre  su  ciudad,  Nueva  York:  escalinatas,  cubos  de basura,  metro…  todas  estas  novelas  gráficas  tienen  la  capacidad plástica,  bajo  su  pluma,  de  convertirse  en  hermosos  relatos, homena

Leyendo se entiende la gente: Rayuela, de Cortázar

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  RAYUELA DE JULIO CORTÁZAR   Cuando leí “Rayuela” de Julio Cortázar yo tenía 17 años, y lo hice por recomendación de mi profesora de literatura en el último año del instituto. No sé si su elección fue fruto del azar o porque me conocía mejor de lo que yo misma lo hacía entonces, pero lo cierto es que la novela me impactó como no recuerdo que lo haya hecho ningún otro libro. Para la adolescente que yo era, que intuía que algo no iba bien en nuestro mundo, “Rayuela” supuso el descubrimiento de otra forma de enfrentar la vida y la literatura. Acompañaba a sus personajes por París y Buenos Aires mientras me proporcionaban múltiples motivos de reflexión a partir de citas, referencias, diálogos y pensamientos. Porque el libro no es solo una historia de amor, de amistad y de nostalgia, sino que está lleno de ideas y sugerencias. A través de lo que sus protagonistas sentían y decían (y, sobre todo, dicen tanto…), yo confirmaba la sospecha de que en algún momento de la historia de la

Leyendo se entiende la gente: Federico, de Ilu Ros

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  Acercarse a la personalidad de Lorca siempre es fascinante. Desde los primeros textos que me acompañan desde la niñez hasta aquellos que he ido incorporando a lo largo de mi vida, Federico siempre ofrece una visión del mundo brillante, explosiva, musical y profunda. Ilu Ros, “la gran dibujante y contadora de historias” tal y como la define Elvira Lindo, ha sabido ver muy bien todo esto. Acompaña al texto, preciosísimo, lleno de cartas, conversaciones y confidencias de la vida lorquiana, un maravilloso mundo ilustrado que llena de pasión una historia ya de por sí apasionante. Ilu Ros crea una obra desde la admiración al poeta y de ese modo deja bien claro lo que sentimos hace tiempo los devotos lorquianos: Federico está en el alma de todos aquellos que le conocen, y también, aunque no quieran, de los que no lo hacen. Esa es su grandeza. “Puesto que no podía salir todo, me dejé llevar por lo que a mí más me emocionaba o me enternecía de Federico”, argumenta la autora. Con ese respe

Ilustrando a Poe.

 Los alumnos de 2º bloque de Bachillerato de Artes del nocturno en la asignatura de Técnicas Gráfico Plásticas han llevado a cabo una serie de trabajos en los que han puesto en práctica lo aprendido sobre la técnica del carboncillo.  Los dibujos están inspirados en los cuentos de Edgar Allan Poe.  En el siguiente enlace podéis leerlos:  http://recursosbiblio.url.edu. gt/publilppm/Libros/2015/ edgar-cuentos.pdf Y en éste, oirlos:  https://www.youtube.com/ results?search_query=audio+poe

Don't be afraid to read🎃🕸️ Scary short stories: Shadow

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  I can’t stand it anymore, I’m slowly going crazy. My mind has fallen to a river full of negative thoughts.  I see them all day. They are shadows in my head with bright eyes full of calming energy. At first, they appeared just as nightmares but then as hallucinations. With more frequency, they showed up in front of my eyes. They whisper to my ear. “If I leave my room, I’ll die” The shadows don't lie, they have already killed my family. Although they want to make me think it was me who killed them. I can’t stand it anymore, I’m crazier than ever before. They promised that if I take their hand, all of this would stop. Maybe I should give up and embrace death.   Elizabeth Shapovalova 2º Bachillerato X

Recuerda octubre

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 recuerda octubre daría lo que fuera para volver a vivir octubre rayos de sol que huelen a manzanas rojas se cuelan entre las viejas hojas a punto de morir, en el éxtasis de su belleza. una luz antigua. te negro con canela. un jersey que parece un abrazo. un suspiro. una lágrima. garabatos con tinta negra en el margen de los libros. aquella foto en la que parecía que mi pelo estaba hecho de cobre unas viejas zapatillas cómodas y desgastadas. manos manchadas de carboncillo. sonrisas vistas por primera vez. nuevos y viejos amigos. los alientos mezclados en el aire helado de la mañana. silencio. el amanecer a través de la ventanilla del tren. la brisa que te avisa de lo que está por venir el final es lluvia. lluvia y recuerdos. diana garcía 1°baw, octubre 2021 ( el uso de minúsculas es una licencia poética de la autora)

Leyendo se entiende la gente: La guerra de las salamandras, Karel Capek

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  La década de 1930 presentaba un panorama incierto y Karel Capek supo plasmar la locura de la época. Escrita en 1936 por un antifascista declarado, La guerra de las salamandras es una distopía premonitoria de los sucesos que estaban por llegar, pero también una crítica brutal hacia el colonialismo, el comercio de esclavos, la explotación laboral, el capitalismo, los nacionalismos y el fascismo. La sátira y la ciencia ficción se mezclan en un relato muy humano en el que el autor logra hilar con mucho humor el periodismo sensacionalista, la biología, la reflexión teológica e incluso tratados sobre educación, para contarnos una historia en la que, a pesar de sus curiosas protagonistas, nos vemos reflejados con nuestras luces y sombras. Todo comienza con el descubrimiento de unas pacíficas criaturas (Andrias scheuchzeri) y su comercialización como mano de obra barata en un mundo en expansión y competencia. Pronto, las salamandras demostrarán rasgos muy humanos que traerán de cabeza a la c